Siempre ha
llamado la atención sobre como viaja la llama olímpica entre ciudades o países,
cuando no es transportada por el relevo de atletas que la llevan en sus manos
trotando una determinada cantidad de kilómetros. Pues bien en esta nueva
entrega de cultura aeronáutica, explicaremos de manera detallada como viaja la
llama olímpica en aviones comerciales de pasajeros.
La llama
olímpica, por tradición y para ambos juegos olímpicos (verano e invierno), es
encendida en el Partenón de Atenas (Grecia) por ser la cultura griega la
creadora de las Olimpiadas, utilizando directamente los rayos del sol que son
dirigidos por un espejo cóncavo hacia un pebetero donde se ignita la antorcha
que iniciará el relevo de atletas y el largo recorrido, hasta llegar a la
ciudad sede de los juegos olímpicos donde encenderá el pebetero que iluminara
la ciudad mientras se desarrollen las actividades deportivas.
Ceremonia de encendido de la llama olímpica en el Partenón de Atenas (Grecia).
Ahora bien,
una vez realizada la ceremonia en Grecia, la llama deberá llegar hasta el país
sede de las olimpiadas, parte del trayecto es realizado muchas veces en avión.
Bien es conocida la estricta seguridad aeroportuaria en donde no se permite el
traslado de material inflamable a bordo de la cabina de pasajeros ni en las
bodegas de carga de los aviones, entonces surge la pregunta ¿Cómo viaja la
llama olímpica en los aviones?
La respuesta a
esta pregunta es la siguiente: La llama olímpica, se clasifica como un fuego
controlado especial de tipo ceremonial y el cual puede ser transportado en
aviones siguiendo un estricto protocolo de seguridad y bajo la vigilancia y
logística de personal calificado. La llama no se apaga durante el viaje aéreo y
vuela en una lámpara especial de seguridad denominada “Lampara Davy”,
adicionalmente, la lámpara viaja sujeta a un asiento especial por un arnés. Se
le coloca a la lámpara un combustible especial que minimiza el humo y los gases
de combustión y solo se coloca el volumen de combustible requerido para
efectuar el vuelo.
Lampara Davy conteniendo la llama para los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Como datos
curiosos, para los Juegos Olímpicos de Londres 2012, British Airways habilitó
un avión Airbus A-319 (matricula: G-EUPC), con
un livery especial y bautizado “The Flyfire” (La Luciernaga), para el traslado
de la llama olímpica (ver foto en el inicio de este artículo con créditos a su respectivo autor).
La llama
olímpica también viajo a bordo del Concorde, en este caso perteneciente a Air
France, para llegar a territorio francés, durante su recorrido para llegar a la
ciudad de Albertville, sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 1992.
Escrito por:
José A. Ramírez V. (“Rooster”).
Corresponsal Aviamil del Estado Falcón.
@betoramirez30
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